Buenas tardes, estimados lectores del blog.
Me uní al hype y he leído el libro del momento. Como siempre, vamos a poner un poco de música para hacer la lectura de la reseña más entretenida; abran el link, suban el volumen.
Allá vamos.
FICHA TÉCNICA
- Título: Yo soy Simón.
- Autora: Becky Albertalli.
- Editorial: PUCK.
- Páginas: 282.
- ISBN: 978-987-4132-00-0
SINOPSIS: ¿Qué serías capaz de hacer para proteger tu secreto mejor guardado?
Simon ha hecho lo impensable: ceder al chantaje de Martin. O Simon se las ingenia para que su amiga Abby salga con Martin o este le hablará a todo el mundo de los correos electrónicos. De los correos electrónicos que Simon, escondido tras un seudónimo, intercambia con un tal Bluegreen, que es el chico más divertido, desconcertante y adorable que Simon ha conocido nunca. Y es que Simon, pese a su afición al teatro, prefiere no exponer a los focos su identidad sexual, al menos de momento. Sin embargo, seguirle la corriente a Martin no será la solución a sus problemas, sino más bien el comienzo de un enorme embrollo.
¿Qué hará Martin si no consigue conquistar a Abby?
¿Cómo reaccionará Abby si se entera del chantaje?
¿Qué pensará Bluegreen de Simon si la intimidad de ambos queda comprometida?
Y, la cuestión más importante: ¿Quién demonios es Bluegreen?
Aviso de antemano que en la reseña hablaré de mi forma de ver a los personajes, contando un poco de la historia, pero haciendo hincapié en mi percepción acerca de las personalidades de los personajes. Si no la han leído, recomiendo que no sigan a menos que amen los spoilers. Alerta permanente.
Simón es gay.
Y así como muchos otros chicos de 16 años, intercambia mails con alguien. Pero ése alguien es un chico llamado Blue, con el cual puede sentirse completamente libre de ser quien realmente es.
Simón sigue ‘dentro del clóset’ porque tiene miedo de la reacción que el mundo puede llegar a tener hacia él, más sabiendo que en su ciudad otras personas del colectivo LGBT+ fueron acosadas por su condición. Sin embargo, las cosas no salen exactamente como él quiere: Martin, uno de sus compañeros de clase, encuentra su cuenta abierta y amenaza con mostrarle a todo el mundo las capturas de pantalla que hizo de los emails, dejando expuesta así la sexualidad de Simón. ¿Qué debe hacer nuestro protagonista? Ceder ante el chantaje que le impone Martin e intentar que Abby, una de sus amigas, caiga en sus redes.
¿Me gustó? Mucho. La historia de amor entre Simon y Blue no es lo más importante de la trama y éso hace que para mí todo se torne interesante; si bien inicialmente me resultó un tanto cliché, es bueno ver que la narrativa evoluciona alrededor de ítems más importantes.
La verdadera importancia del libro es la identidad. Simón tiene miedo de confesar su verdad, pero también tiene el derecho a ser libre y eso es lo que incomoda. ¿Por qué lo normal es ser heterosexual y blanco? ¿Por qué ésas características son aceptables socialmente y las otras no? ¿Por qué tiene que ‘salir del clóset’ en cada acción que realiza? ¿Acaso no merece ser feliz sin tener sobre él la mirada cuestionadora del universo? Con el correr de los días, Simón podrá liberarse de todas las ataduras que lo han dominado durante toda su vida; pero no le será tan simple. Cada batalla deja heridas, y cada herida trae su cuota de dolor.
¿Por qué terminaremos odiando a Martin más allá de todas las cosas? Porque le quitó a Simón la posibilidad de elegir. DEBE salir del clóset porque todo el mundo ha leído un post en Tumblr y ya no tiene escapatoria: he aquí el momento de impotencia máxima para el lector. Es terrible ver hasta dónde puede llegar una persona sólo por envidia, por venganza o por negación.
La fuerza de la amistad se marca en cada situación. Para Simón, el apoyo de sus amigos es fundamental, a pesar de la enorme cantidad de tiempo que él tardó en confesar su verdad. Y si de algo tengo la certeza de no poder expresarme con claridad es acerca de lo difícil que debe ser para las personas LGBT+ abrirse. No todos tienen la suerte de ser aceptados fácilmente dentro de su círculo más íntimo, ya que los prejuicios, la religión y la falta de información suelen imponer barreras innecesarias. Como heterosexual, me resulta imposible intentar comprender lo que viven día tras día aquellos que no se animan a salir del clóset; lo único que puedo hacer para aliviar un poco con la carga que llevan, es mostrarles mi más profundo respeto y recordarles que no están solos.
¿Por qué no le di puntaje perfecto? Porque supe quién iba a ser Blue de inmediato. Por más de las vueltas que da la autora para develarlo, encontré fácilmente al misterioso muchacho. Aún así, para mi no era tan importante, fuera quien fuera…
¿Qué me enloqueció? La música. Las canciones que se nombran en la historia son bellísimas. Y debo aceptar que no conocía a Elliott Smith y ahora no puedo dejar de escucharlo. Me encanta cuando los libros mencionan música de ‘otra época’, porque así, las nuevas generaciones podrán acceder a intérpretes que les son ajenos. Punto SÚPER a favor para Becky.
¿Lo recomiendo? Ámpliamente. La lectura es dinámica y divertida, la trama es interesante y los personajes valen la pena. Ojalá todo el mundo lo leyera, no sólo los adolescentes y las personas del colectivo LGBT+ para lograr que la empatía sea moneda corriente.
Todos tenemos derecho a amar y ser amados, sin importar nuestra raza, religión, color o condición sexual. Brindemos con una malteada de Óreo por un mundo con más amor y menos prejuicios.
Puntaje final: 4 ⋆⋆⋆⋆| 5
Nos vemos en la próxima entrada.
Un abrazo, y como siempre, gracias por leer.
Lizz ✩
Situación Caprichosa 